No quería acabar el año sin hacerle un pequeño homenaje al gran José Mojica Marins. ¡Ese hombre para el que halloween era los 365 días del año! ¡Larga vida a Zé Do Caixão!
À meia-noite levarei sua alma (1964) y Esta noite encarnarei no teu cadáver (1967). Tal y como los títulos de sus películas profetizaban, el diabólico Zé do Caixão acabó poseyendo a su creador, José Mojica Marins, en cuerpo y alma. Su empeño por dar vida al personaje dentro y fuera de la ficción hizo que medio Brasil confundiera al personaje con la persona. Es el precio que hay que pagar por convertir tu propia vida en una extraordinaria performance. Como diría el propio Mojica Marins en su última película: «¡El precio por ser la Encarnação do Demônio (2008)!».